9/1/08

POR CAMBIAR (26/12/07)

Y digo yo que algún día,
aunque sea por cambiar,
sin excusa, debería
dedicarte algún cantar.
-
Versos que te piropeen,
que digan lo guapa que estás,
ni muy largos ni muy breves,
mi alma te escribirá.
-
Descarnando el corazón
para que salga la luz,
pa' explicarte mi amor:
Mi bolígrafo eres tú.
-
No fluye fácil la tinta
que sale de mi universo.
Que no te engañen mis pintas:
No estoy hecho de recuerdos.
-
Pero recuerdo tus labios
cuando no rozan los míos.
Y me hace aguantar mil años
sentado junto a tu río.
-
Bajo mi carne te traigo,
en la Luna te diviso,
en las calles y el asfalto,
en flores, fiestas y olvidos.
-
Y te siento hasta en mis huesos,
en mis venas y en mis ojos,
en el sudor de mi exceso,
en mis mañanas de rojo.
-
Y quedo ciego al mirarte
del resplandor de tu cuerpo,
de tus formas, del desplante
que pareces darle al tiempo.

BANLIEU '06

Siempre has dicho que el mundo está roto,
siempre has dicho que todo está muy mal,
siempre quejándote, siempre llorando,
siempre con dudas ¡Siempre molestando!
-
Y ahora, por fin, has querido ser otro.
Ahora, por fin, has querido actuar.
Por fin has querido vivir peleando.
Ahora ves cómo está todo cambiando.
-
Yo digo, muchacho, que sigas así,
que nada te cambie en tu actitud,
que el puto dinero está ahí acechando.
Que el poder no pueda pudrir tu virtud.
-
No envejezcas nunca.
No sueltes bocado.
Sé como un perro.
¡ESTO HA COMENZADO!
-
Tú has elegido cómo quieres vivir
y créeme chico, la forma es esa.
Eres civilizado y luchas por tu vida.
Eres francés, vives en París.

LA SONRISA DE UN NIÑO (20/02/06)

La sonrisa de un niño
me ha alegrado el día.
Uno muy gris y muy sucio.
-
Su sonrisa ha venido
para que yo me sonría
y deje el tiempo desnudo.
-
Y el reloj, sin armas ni ropa,
me deja en paz esta vez
y me vuelvo a sentir bien.
-
Y los nervios me abandonan.








PREFIERO REIR (13/02/06)

No valgo para llorar.
Aunque sufra y aunque muera.
No valgo para arrugar
el entrecejo. Mi espera
no es fructífera y aún así
sigo prefiriendo reir
o luchar, casi lo mismo.
La carcajada es mi ritmo.
Y mi música la risa.
Y en mis ojos una brisa
que al reir refresca el mundo
Y reaviva el discurso.

NO ME CALLO (13/02/06)

¡Ya está! ¡Ya he recaído!
¡Y mira que he intentado
evitarlo! Pero es sino
del que habla por los codos y costuras
a todo sacarle punta.
-
Y yo, que afilo,
que el sacapuntas está pegado
a mi cuerpo, nunca atino
a cerrar la boca para no decir locuras.
Y ¿Por qué no? Es mi pregunta.
-
Si no me quiero callar
pues no lo hago. Y punto.
-
Porque callar es morir
y morir es un segundo,
pero estar muerto...¡Ay, estar muerto!
-
Estar muerto es no sentir.
Es haber llegado al puerto.
Es no volver a reir.
Escribir el fin del cuento.
¡Y eso no! ¡Vamos, ni en coña!
¡De eso nada! ¡Que no! ¡Y punto!

LA PUERTA DE TUS OJOS (13/02/06)

Y qué voy a hacer si soy pesimista.
Si no soy como Chinato.(*)
Si yo veo las tres puertas cerradas.
Si ya ni rimo,
ni siento,
ni digo lo que pienso,
ni escribo con sentimiento.
Si no veo la salida.
¿Acaso la hay?
Sólo en tus ojos, mi vida.
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(*) Con mis respetos y mi más profunda admiración al POETA Manolillo Chinato.

OTOÑO (13/02/06)

Me gusta pisar
las hojas caídas de los árboles
y en sus crujidos me alegro.
Me gusta el otoño,
la ceniza y la lluvia.
Y ver caducarse las hojas.
Me gusta el olor
a limpio del asfalto tras llover.
Y el chapoteo de mis pasos en el suelo.
Me gusta sentir
que el mundo se renueva en cada gota.
Y en cada gota me voy yo hasta el cielo.

HACE TIEMPO

Hace tiempo que no escribo.
Hace tiempo que estoy muerto.
Hace tiempo que el cerebro
se despista sin sentido.
-
Hace tiempo estoy sin ritmo.
Hace tiempo que no sueño.
Hace tiempo que me siento
solo, desnudo y perdido.
-
Hace tiempo, mucho tiempo
que estoy metido en un lío
del que no puedo salir.
-
Hace tiempo ¡Cuánto tiempo!
que no sé vivir despacio.
¿Por qué sigo sin vivir?



PUTO DINERO (24/08/07)

El planeta que se queja, los árboles que se mueren,
los peces se dejan llevar.
Ya no hay linces, no se mueven.
Las rocas son ahora hormigón.
Las vigas extienden sus redes
rodeadas de farolas
con troncos de acero que hieden.
Yo me duermo y ya no grito.
No vaya a ser que, a veces,
me dé por pensar distinto
y la economía se frene.