PRONTO REFRESCARÁ (16/06/21)

Supongo que necesito el viento en el pecho

por el hecho del encierro y el calor.

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Supongo que es peor sentirse estrecho.

O el despecho.  O el odio.  O el rencor.

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Supongo que me desquito estando al acecho

y me echo sin temor la vida al hombro.

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Supongo que el más alto de los techos

es muy bajo.  Y muy oscuro.  Y muy hondo.

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Supongo que está escrito, que está hecho.

Me relajo.  Y la vida fluye ya.

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Me opongo.  No voy a estar quieto.

No me duermo.  Pronto refrescará.

VIERNES SOLEADO (04/06/21)

 Sale el sol entre las nubes

en esta mañana de primavera

de un junio recién empezado

que trae aromas de nueva era.

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Sale el sol y el ánimo sube

y se ve el final de esta pandemia.

Sale el sol y yo, animado,

lo celebro en mi trinchera.

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Sale el sol.  Y encima es viernes.

PARECE QUE YA (04/06/21)

 Vuelvo a los cortados mañaneros,
al madrugón distinto de mi coche,
y parece -a mí, al menos-
que vuelve la luz a iluminar,
y no me cuesta madrugar
como hace más de un año me costaba.
Porque parece que la noche
ha perdido la guerra con el día
y es por ello que hoy quería
escribir desordenadas las palabras
para ver si así salía poesía
y dar las gracias a quien las merece,
fuerza a quien la necesita
y homenaje a quien nos cuida.

HABLAR BIEN (02/06/21)

 No pillo fácilmente los dobles sentidos

ni soy de los que los usan a menudo.

Procuro callar por no parecer rudo

aunque casi nunca lo consigo.

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Se me escapan reniegos repetidos

y envejezco cada vez que digo uno,

 si acaso consiguiese quedar mudo

se me nota en la cara asco y hastío.

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No sé si es un problema, lo confieso.

Tengo mala boca, ya lo sé.

Y poca sangre fría, por supuesto.

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Debería hacer algún progreso

e intentar por lo menos hablar bien.

Pero ¡Joder!¡Qué difícil, esto!