Este anticiclón eterno me está matando.
Me ahogo. Me ahoga este seco invierno.
Y pierdo y me pierdo, acalorado,
entre el abrigo gordo y el fuego interno.
-
Esta falta de lluvia me está drenando.
Me seca. Me seco y ya no discierno
si ya es primavera o aún no ha llegado
o si puedo, quizás, culpar al gobierno.
-
Este enero y febrero, seco y sempiterno.
Este inicio de año,
pequeño infierno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario